Cuando hablamos de un hogar, hay muchas cuestiones a tener en cuenta. Unas de las más relevantes son las que tienen que ver con la seguridad de la vivienda, donde las puertas juegan un papel protagonista. Las puertas son la primera barrera con las que se encuentran los intrusos a la hora de entrar en un inmueble. Y precisamente por ello acertar con la elección del modelo a instalar resulta muy importante.

Por este motivo, al igual que hicimos en el artículo ‘Consejos prácticos para mantener las cerraduras en buen estado’, hoy te traemos los consejos imprescindibles para elegir una puerta de seguridad. De modo que si quieres cambiar la puerta de tu vivienda y optar por una que te brinde mayor seguridad, estás en el lugar adecuado. Atento a todo lo que vamos a contarte al respecto en este nuevo post.

Cuatro consejos clave al elegir una puerta de seguridad

Para elegir una puerta de seguridad que sea realmente buena hay que tener en cuenta una gran cantidad de cosas. Sin embargo, la realidad es que se trata de una elección que puede ser bastante compleja si no se cuentan con los suficientes conocimientos técnicos sobre ellas. Ante esta situación, desde Cerrajería Alberto estaremos encantados de ofrecerte nuestro asesoramiento para que des con la mejor puerta de seguridad posible para tu hogar.

Y, además de ofrecerte ese asesoramiento especializado, hoy te traemos cuatro consejos clave para que no falles a la hora de elegir una puerta de estas características. Porque a parte del diseño hay que valorar otros aspectos para no fallar en nuestra decisión.

  1. La puerta es un elemento disuasorio
    Lo primero que debes tener en cuenta es que el objetivo de la puerta de seguridad es el de hacer más segura tu casa y funcionar como disuasión frente a los delincuentes. Puedes optar por puertas blindadas o acorazadas, siendo las segundas las que ofrecen una mayor resistencia a la hora de ser forzadas. Contar con una buena puerta de seguridad hará que tu casa sea menos atractiva para los ladrones.
  2. La resistencia
    En la puerta principal de una casa la resistencia que esta ofrezca resulta un aspecto clave. Esto es algo que en Europa puede conocerse de forma fácil gracias a la homologación, ya que la normativa europea establece unos estándares relativos al nivel de resistencia que ofrecen las puertas. Existen clases que van de la 1 a la 6, siendo la última la más segura de todas.
  3. Más allá de la seguridad
    Existen otras variables a tener en cuenta más allá de la resistencia y seguridad que ofrezca la puerta. Por ejemplo, el nivel de eficiencia energética que ofrezca por su capacidad de aislamiento, si es o no resistente al fuego o si es buena ante la suciedad, el viento o el ruido.
  4. La cerradura
    Por último, más allá de la puerta, debes tener en cuenta que la cerradura también es muy importante. De hecho, de poco sirve tener una puerta muy segura si la cerradura es de mala calidad. Procura que tenga varios puntos de cierre y que estos sean independientes entre ellos, de manera que la seguridad sea aún mayor.